Más de 20 extrañas fobias que no conocías
¿Alguna vez se le ocurrió a alguien que un número, una planta o una calle puedan llegar a causar miedo? Aquí te presentamos fobias para todo y para todos.
Turofobia: miedo al queso
Todos los miedos que tengan que ver con comida realmente deben representar situaciones muy complicadas. Por ejemplo, ir al supermercado. Es habitual que existan muestras de distintos tipos de quesos en mostradores y pasillos.
Lo que para algunos puede ser una maravillosa oportunidad de comer un bocadillo gratis, para otros puede significar un momento de ansiedad y nervios, producto de un inofensivo queso. ¡Los empleados deben creer que el alimento había caducado o que el olor es insoportable!
Crematofobia: miedo al dinero
Esto sí que es difícil de imaginar. El mundo está gobernado por el dinero, y en cada situación cotidiana hay que estar en contacto con billetes. Aunque debe ser una fobia muy complicada de transitar, existen ciertas estrategias para quienes la padecen. Por ejemplo, el uso de tarjetas de crédito o métodos de pago digitales.
Claro, seguramente estas personas estén más que felices con la explosión de las criptomonedas y hayan volcado toda su economía a ellas.
Ombrofobia: miedo a la lluvia
No, no tiene nada que ver con los hombros ni con ninguna otra parte del cuerpo. Existe la fobia a la simple lluvia. Como la mayoría de ellas, puede estar relacionada a algún efecto traumático del pasado. En este caso, quienes la padecen pueden sentir los síntomas con solo ver un cielo nublado.
Para muchos es agradable y placentero dormir escuchando las gotas caer, incluso existen aplicaciones que lo simulan. Pero, para otros, pueden ser la peor pesadilla.
Triscaidecafobia: miedo al número 13
Esta fobia está relacionada con algo completamente cultural ya que, en muchos lugares del mundo, el número 13 arrastra supersticiones de todo tipo, casi siempre vinculadas con la mala suerte. Seguramente películas como “Viernes 13” tengan que ver con esta fama negativa.
Tal vez no sea tan grave como otras, debido a que es mucho más extraño cruzarse con un número 13, comparado a los quesos o billetes. Sin embargo, esto suele complicar a las investigaciones médicas. Son fobias extrañas que aún se encuentran en estudio.